La ciudad de Ituzaingó Corrientes, amaneció este viernes bajo un intenso manto de agua tras registrar una precipitación acumulada de 100 mm en las últimas 24 horas, según datos oficiales del Servicio Meteorológico Nacional (SMN) reportados hasta las 9 de la mañana. Este fenómeno climático, caracterizado por lluvias torrenciales durante la madrugada, ha puesto en alerta y generado preocupación por sus impactos en la ciudad y las áreas circundantes.
UN AMANECER BAJO AGUA
Las lluvias comenzaron a intensificarse en la noche del jueves y alcanzaron su pico durante la madrugada, afectando principalmente a Ituzaingó y otras localidades del noreste argentino. El SMN destacó que Ituzaingó se encuentra entre las zonas más afectadas de la región, solo superada por Mercedes, que registró 105 mm. Otras ciudades cercanas, como Corrientes (68 mm), Paso de los Libres (71 mm) y Posadas (56 mm), también reportaron fuertes precipitaciones, evidenciando la magnitud del sistema de tormentas que atraviesa la Mesopotamia argentina.
IMPACTO EN ÁREAS PRÓXIMAS
El volumen de agua caída ha generado múltiples inconvenientes en Ituzaingó y sus alrededores. Entre los principales impactos se destacan:
Impacto en la agricultura: La zona rural de Ituzaingó, donde predomina la actividad ganadera y la producción, enfrenta riesgos por el exceso de humedad. Los productores locales temen pérdidas en cultivos y complicaciones para el traslado de animales debido al estado de los caminos.
Localidades vecinas como Santo Tomé y Virasoro, también afectadas por las lluvias, reportan problemas similares. En Corrientes capital, a unos 230 km, las autoridades han emitido una alerta por posibles crecidas en ríos y arroyos, lo que podría agravar la situación en las próximas horas.
El SMN, por su parte, mantiene un pronóstico de tiempo inestable para las próximas horas, con probabilidad de nuevas lluvias, aunque de menor intensidad. Se espera que las condiciones mejoren hacia la tarde del sábado.
UNA REGIÓN BAJO PRESIÓN CLIMÁTICA
Este evento meteorológico se enmarca en un contexto de creciente inestabilidad climática en el noreste argentino, donde las lluvias intensas y los fenómenos extremos se han vuelto más frecuentes. Expertos atribuyen estas condiciones a la influencia de un sistema de baja presión combinado con el fenómeno de La Niña, que suele intensificar las precipitaciones en la región.
Mientras Ituzaingó y sus alrededores lidian con las consecuencias de esta tormenta, la solidaridad de los vecinos y la rápida respuesta de las autoridades serán clave para superar los desafíos inmediatos.